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28 Jul 2023
La seguridad en el mar y durante el fondeo es quizá el factor más importante en la industria náutica. Después de todo, dado que el riesgo número uno son las colisiones, tiene mucho sentido hacer todo lo posible para proteger su embarcación y su tripulación.
SEA.AI está creando y suministrando tecnología punta para hacer precisamente esto mediante sistemas de cámaras inteligentes que alertan a la tripulación de forma temprana y fiable sobre objetos en la superficie del agua utilizando los sensores ópticos más avanzados en combinación con inteligencia artificial.
Proporciona un nivel sin precedentes de conocimiento de la situación en el mar, detectando y clasificando objetos como balsas, boyas, embarcaciones sin AIS e incluso personas al agua que escapan a los sistemas convencionales como el radar y el AIS. En resumen, es el vigía polivalente 24 horas que supera al ojo humano... ¡y nunca se cansa ni se distrae!
Nueva asociación de marca con IGY
SEA.AI, que acaba de convertirse en socio estratégico de marca de IGY Marinas, espera que cada vez más propietarios y capitanes de yates conozcan esta innovadora tecnología, que no sólo identifica objetos flotantes, sino que también puede combatir la piratería, los robos y los comportamientos hostiles en destinos lejanos y aislados.
"Estoy muy familiarizado con IGY, he seguido su crecimiento y éxito durante los últimos años", afirma Hernando Giraldo, presidente de SEA.AI, Inc. Americas, con sede en Miami. "Todo lo que tocan tiene éxito y, por supuesto, queremos formar parte de ello".
Inspirado en un viaje familiar en velero
La creación de la empresa, con sede en Europa, se inspiró hace seis años en un viaje en velero que el fundador Raphael Biancale emprendió con su padre.
"Raphael tiene experiencia en la industria del software, desarrollando herramientas avanzadas para coches de gama alta en Europa", explica Hernando. "Cuando su padre adquirió un velero, decidió unirse a él para navegar con el yate familiar hasta el Caribe durante el invierno y pasar algún tiempo juntos.
"Al principio de ese viaje, cuando se acercaba el atardecer, su padre dijo: "Raphael, te toca vigilar, ¡asegúrate de que no chocamos con nada!". Raphael dijo que nunca había pasado tanto miedo en su vida: no podía ver su mano, y mucho menos si había algo a 20 m de distancia.
"Esa fue la inspiración para fundar SEA.AI: como alguien que había hecho carrera entendiendo la tecnología, decidió que había una forma mejor de hacerlo".
Protección de todo tipo de embarcaciones
Se inició la investigación para desarrollar una óptica de vanguardia basada en los infrarrojos de visión directa que existen desde hace años. El sistema SEA.AI permite comprender digitalmente el entorno de la embarcación en el agua gracias a las cámaras térmicas y de poca luz de a bordo con procesamiento de imágenes integrado.
Una interfaz intuitiva que utiliza la inteligencia artificial para detectar automáticamente todo lo que no es agua. La impresionante base de datos de más de 9 millones de objetos marinos anotados crece continuamente con nuevos conjuntos de datos de los usuarios para mejorar el rendimiento de esta revolucionaria visión artificial en el mar.
Una multitud de modelos dan servicio a todo tipo de embarcaciones, desde yates de recreo a motor y vela hasta flotas comerciales, embarcaciones de la policía, la marina y los guardacostas y equipos de primera intervención.
Por lo general, el modelo Sentry es adecuado para uso comercial, gubernamental y en superyates, mientras que Offshore ofrece seguridad de alta tecnología para los navegantes de alta mar y el modelo Competition es ideal para regatas oceánicas y yates de alto rendimiento con mástil giratorio. En cuanto al alcance de detección, Offshore One puede detectar una persona o una boya a 100 m, una embarcación auxiliar o semirrígida a 250 m y un yate a 1.000 m.
Gracias a varios equipos de regatas oceánicas que participaron en el desarrollo de esta innovación, el crecimiento del negocio fue rápido e impactante, y los productos se vendieron sobre todo en el mundo de la vela de competición y de alto rendimiento.
"Este mercado encajaba perfectamente con nosotros y la adopción fue casi instantánea", añade Hernando. "Fue fácil introducirse en la navegación de recreo, ya que el producto no necesitaba modificaciones al estar diseñado para colocarse en la parte superior de un mástil.
"Lo que nos llevó mucho más tiempo, investigación y dinero fue desarrollar productos para el segmento de las embarcaciones a motor, que no tienen un mástil alto, por lo que la tecnología y las necesidades eran diferentes. Sin embargo, el sistema Sentry existente, que puede girar y vigilar, se adapta perfectamente a los superyates, y estamos recibiendo muy buenos comentarios de los propietarios de superyates que ven cómo nuestro sistema marca la diferencia".
"A medida que recopilamos y procesamos datos de nuestros buques, actualizamos los sistemas de software, lo que nos lleva a detectar ciertas cosas más rápidamente".
Único y asequible
Con más de 300.000 millas náuticas de experiencia en el agua en todo el mundo, tanto si se embarca en una aventura familiar alrededor del mundo, como si participa en una regata Vendée Globe o es un astillero que desea ofrecer a sus clientes la última tecnología para la máxima seguridad de la tripulación y los invitados, no querrá prescindir del sistema SEA.AI.
El coste de entrada para un superyate de 24 m (80 pies) es inferior a 50.000 dólares totalmente instalado, y está adaptado para funcionar en todos los dispositivos, incluidos Apple iOS y android.
El equipo multinacional de SEA.AI, formado por más de 50 profesionales, tiene su sede en Austria, Francia, Portugal y Estados Unidos, y el sistema ya está disponible en más de 40 países a través de su creciente red de más de 100 distribuidores.
No cabe duda de que el rápido crecimiento de la IA ha sido un factor que ha impulsado el avance de SEA.AI, y Hernando espera que el aumento de la educación y la concienciación sobre los beneficios que puede aportar la IA compensen los temores irracionales que a veces puede suscitar.
"No sustituye al radar, al AIS ni al ser humano, sino que es una herramienta más que permite al operador tomar la mejor decisión posible", afirma.
"Esta tecnología es completamente nueva y representa un cambio de paradigma. Cuando la gente oye IA, le surgen muchas emociones, porque aún es demasiado nueva para entenderla del todo.
"El componente de la IA que utilizamos, la visión artificial, es muy limitado: somos expertos en ese campo y lo aplicamos a la seguridad de la navegación. La visión artificial interpreta el flujo de vídeo y aplica datos históricos, información y anotaciones para detectar objetos flotantes.
"Seguimos desarrollando la visión artificial en el mar, la concienciación y el acceso, que esperamos impulsar aún más a través de IGY como marca consolidada que cuenta con instalaciones físicas allí donde van los barcos".
FINES
